¡Huyamos, ahora que podemos!

Garcia de Saura  | AUTOR
Autopublicado | EDITORIAL
233 | PÁGINAS

Cuando Iris y Ana fueron a las fiestas de Villa Despelúcame el Ovejo, el pueblo de al lado, no imaginaron que terminarían la noche huyendo del lugar del crimen. Por un despiste y una mala decisión, acabaron cargándose a Don Pepino, patrón del pueblo, principal reclamo de peregrinación e ingresos, y con él… varios siglos de historia. Convertidas en prófugas de la justicia, harán todo lo posible por despistar a los vecinos que, de forma incesante e incluso bajo recompensa, buscarán a los culpables. Pero el destino les pondrá en su camino a dos desconocidos y seductores forasteros, que acabarán siendo sus mayores aliados. ¿O será solo lo que ellas quieren creer? 

Reseña

¡Huyamos, ahora que podemos!, es la tercera novela que leo de la autora, en este caso, nos encontramos con una historia cargada de humor, intriga y romance. La novela nos sitúa en dos pueblos de nombres bastante curiosos: Villa Pepino y Villa Despelúcame el Ovejo. Nada más empezar la novela, ya podemos intuir con estos nombres que la novela va a ser bastante divertida. Además, lo vamos confirmando con los nombres de personajes que van apareciendo a lo largo de toda la novela, pues parece ser, que es costumbre en el pueblo poner nombres poco bonitos.

La novela comienza con un prólogo donde nos cuenta la leyenda sobre estos dos pueblos, enemistados y enfrentados antaño por un tema de la natalidad, pues en un momento dado comenzaron a nacer niños muy similares entre sí, dando lugar a la creencia de que todos provenían de un mismo padre. Todo este tema llevó a la creación de una escultura que se convertiría en el patrón del pueblo, Don Pepino, que sería venerado por todo el mundo.

A continuación, conocemos a Ana e Iris, dos amigas que van a salir de fiesta al pueblo vecino, con la mala suerte de que a su vuelta y por el despiste de una de ellas, terminan estrellando el coche contra la escultura de Don Pepino. A partir de entonces, ellas sólo intentan evitar ser descubiertas, intentando despistar a los vecinos y haciéndoles creer que sido otros motivos los que han llevado a la ruptura de la escultura.

"-Dicen que ha sido el calor. ¿No os habéis enterado?

-¿El calor?- preguntó Indalecio, el camarero, uniéndose a la conversación al llegar hasta nosotras.

-Si, eso han dicho - afirmé-. El calor no trae nada bueno - mentí, menudas fiestas nos pegábamos en verano"

Pero su plan de despiste se verá trastocado con la llegada de dos misteriosos hombres que pondrán las vidas de Ana e Iris patas arriba.

En cuanto a personajes, encontramos cuatro protagonistas: dos femeninos y dos masculinos. Ana e Iris tienen veinticinco años, trabajan en una tienda de peletería y son mejores amigas desde siempre. Aunque podemos ver queda cada una tiene un carácter completamente diferente a la otra. 

Iris es una chica más calmada y tranquila, además de enamoradiza, a pesar de que ella comenta en varios capítulos que no cree en la caballerosidad, no puede evitar caer rendida ante los pies de "su chico".

Ana por el contrario, tiene un carácter bastante fuerte, que chocará en todo momento con "don chulito". 

"-¿Es eso lo que quieres, morena?¿Tocarme?

...

-Lo siento, pero no puedes- dijo, colocándose a escasos centímetros de mi. 

-Tú no eres nadie para decirme lo que debo o no debo hacer- bramé plantándole cara"

Los protagonistas masculinos han sido un completo misterio para mi durante toda la novela, no he llegado a pillarlos por ningún lado, ni a comprender de que va todo, la autora me ha mantenido con la intriga hasta el final sin desvelar nada. Encontramos algún momento más emotivo con uno de ellos en cierta parte de la novela, pero el resto, no se dejan conocer. Además, lo curioso de ellos es que no conocemos sus nombres hasta el final de esta novela, pues sólo conocemos el apellido de cada uno de ellos. 

Yo conocía los nombres antes de leer la novela, porque en la presentación, la autora contó de donde habían salido estos, y que a pesar de los nombres que tienen, comentó que podían llegar a enamorarnos perfectamente obviando su nombre, digamos poco común. Creo que lo ha logrado completamente, pero espero poder conocer más de ellos en la segunda parte de la novela, que será el desenlace de la historia de estos cuatro personajes.

La novela está narrada en primera persona, desde el punto de vista de Ana e Iris, la autora va alternando a ambas protagonistas en cada capítulo, de manera que podemos ver perfectamente como es cada una de ellas, como se siente, lo que piensa, etc.

Además, también introduce algún capítulo narrado por los chicos, en los cuales nos desubica aún más, porque, como ya he comentado, no se por donde pillarlos.

La autora tiene una pluma ligera y una forma de escribir muy fluida, que hace que las páginas pasen volando. Es un libro que se lee perfectamente en un día, como ha sido mi caso.

Nos encontramos con escenas de todo tipo, algunas más divertidas, otras más románticas, pero sobre todo me han encantado los encuentros entre Ana y Muñoz, pues se podía ver en el ambiente como saltaban las chispas entre ambos. 

El desenlace me ha dejado con ganas de seguir sabiendo que va a ocurrir, pues la autora nos ha dejado con un: continuara..., dejando la historia en el momento más lioso y emocionante.